Un secreto superlativo

De excelente ubicación, este hotel de Manhattan se encuentra a tan solo dos minutos a pie de Central Park y del Lincoln Center for the Performing Arts. Es un lugar ideal para descubrir caminando la parte más popular de Manhattan. Times Square y el interesante circuito de los teatros en Broadway se encuentra a tan solo 20 minutos. El Museo de Arte y Diseño también se encuentran a cinco minutos. Columbus Circle está a cuatro manzanas en dirección sur.

Empire Hotel fue ampliamente reformado en 2007. Lo más buscado es la fantástica alberca del roof garden, una hermosa terraza con cómodos sillones para disfrutar de vistas panorámicas a Nueva York, tomando un sabroso cocktail y algo de comer en la temporada estival, servido por el pool deck. ¿Por qué no disfrutar de un billar con vistas a  Central Park? El salón en la azotea del Empire ofrece unas magníficas y majestuosas vistas del río Hudson. El vestíbulo, con su suelo de madera y sus detalles en metal, es un acertado homenaje a la arquitectura del Lincoln Center, diseño predominante en la década de 1960.

 

 

Upper West Side

Upper West Side no es la zona más exclusiva de la ciudad, pero es un excelente punto para moverse y descubrir lo más destacado de la ciudad de Nueva York, más allá de los clichés y los tópicos meramente turísticos que nos mostraron en televisión. Al igual que en cualquier lugar en Nueva York, aquí también es fácil encontrar grandes restaurantes. Ahora bien, no se ubican en esta zona las grandes discotecas con alfombras de terciopelo, boutiques de moda y galerías de arte. En esta área, predominan los bares más populosos y tiendas de ropa casual. 

Además del Museo de Arte Popular, se ubican el Museo de los Niños de Manhattan, el Museo Americano de Historia Natural y el Planetario Hayden, convirtiendo a Upper Side West en un área recreativa para las familias que buscan otras alternativas a la multitudinaria Times Square, verdadero polo de atracción de turistas.

 

 

El hotel boutique Empire Hotel cuenta con 422 habitaciones. Hay que mencionar que algunas de ellas no son muy amplias, pero es algo característico del universo de Manhattan. Todas las habitaciones están exquisitamente decoradas. Cada una de ellas combina los colores de las tonalidades tierra que predominan en Central Park y el modernismo del Lincoln Center. Es un lugar donde se equilibran la comodidad y la virtud de la sofisticación. Funcionalidad y toques románticos en camas vestidas con elegantes sábanas italianas. El servicio, con un staff cosmopolita y políglota, es sobresaliente, muy profesional, amable y atento. 

Las habitaciones incluyen en el baño duchas con efectos de lluvia tropical, además de suelos de teca. Entre las prestaciones destacan la estación base para MP3 y la gran televisión de pantalla plana. El establecimiento ofrece alojamiento gratuito a los niños hasta de 12 años, siempre que ocupen la misma habitación que sus padres o tutores, utilizando las camas existentes.

Los huéspedes del Empire Hotel pueden disfrutar de la buena gastronomía en el Ed’s Chowder House, su restaurante especializado en mariscos. El Rooftop Bar & Lounge, ubicado en la 12ª planta, también ofrece platillos. Este elegante bar cuenta con un salón que tiene chimenea y un techo retráctil que permite disfrutar del descanso sin los condicionantes del clima. Las vistas de la ciudad son muy atractivas y una verdadera fuente de inspiración. El Lobby Bar, por otro lado, ofrece un ambiente íntimo para tomar un aperitivo antes del almuerzo o la cena. Se encuentra en el vestíbulo del hotel, con sofás muy cómodos y una iluminación más apropiada para la tarde. Es la zona más concurrida del establecimiento.

 

 

 

De los más antiguos de Manhattan

Un detalle importante a destacar es la cercana celebración de la Semana de la Moda de Nueva York, que tiene lugar cada edición en el Bryant Park del Lincoln Center. A tan solo unos pasos de este hotel, podrá ver el ambiente más fashion y observar a la gente ir y venir de las pasarelas a las fiestas nocturnas.

Puede que un jueves por la noche se lleve una agradable sorpresa y encuentre a un DJ “sirviendo” música de los años 80 y 90. Otras comodidades que se pueden destacar son el spa, un pequeño gimnasio -con juego pesas y algunas máquinas- y servicio para mascotas que ofrece camas para gatos y perros.

Hermosas casas de piedra de pasadas décadas se mezclan en el distrito con altos edificios de modernos apartamentos más ostentosos. Empire es uno de los hoteles más antiguos de Manhattan, pero su renovación lo ha convertido en un refugio moderno, con un interesante salón en su elegante azotea, que cuenta con alberca y bar. Conserva su característico letrero gigante de neón desde el año 1920, todo un símbolo destellante de luz roja.

 

 

Texto: Amura ± Foto: CLOUDFRONT / JETCDN / DICK JOHNSON / MULTIPRESS / JKST / WALD