Pulse Topology, la obra de arte inmersiva del artista electrónico mexicano-canadiense Rafael Lozano-Hemme forma parte de la exposición Every Wall Is a Door de Superblue Miami.

La exhibición Superblue, un centro de experiencias inmersivas que catalizan la conexión humana compartida, se realiza de noviembre hasta agosto de 2023. El espectáculo ofrece a los visitantes la oportunidad de ser transportados a una serie de nuevos mundos en una visita a través de instalaciones dinámicas creadas por tres de los principales artistas experienciales del mundo: Es Devlin, teamLab y James Turrell.

Pulse Topology es una obra de arte biométrica inmersiva que consiste en 3,000 bombillas suspendidas, cada una de las cuales brilla al ritmo de los latidos de los participantes. A medida que los visitantes atraviesan una serie de crestas y valles de luces pulsantes en Superblue, los sensores detectan y registran nuevos latidos que sustituyen a los anteriores, creando un memento mori (frase latina que recuerda la mortalidad del ser humano) en el que el rastro de los latidos individuales cobra fuerza poética como un poderoso coro de conexiones humanas.

Las obras de Lozano-Hemmer se caracterizan por activarse mediante los datos biométricos en tiempo real de los participantes, como sus latidos del corazón, respiración, voz o huellas dactilares, llevando la naturaleza de la participación del público hasta sus límites.

 

“La capacidad de Rafael Lozano-Hemmer para visualizar datos biométricos a través de tecnologías audiovisuales es extraordinaria y refleja perfectamente el enfoque de Superblue sobre el arte experiencial”.

Mollie Dent-Brocklehurst, cofundadora y directora ejecutiva de Superblue.

 

Obra tecnología

Inspirado en conversaciones con ingenieros y diseñadores de BMW y en el espíritu de una verdadera colaboración interdisciplinaria, el estudio de Lozano-Hemmer aplicará la tecnología detrás de Pulse Topology para visualizar los latidos del corazón a través de la luz, el sonido y los gráficos.

Pulse Topology es la culminación de la serie de obras de arte biométricas que Lozano-Hemmer expuso por primera vez a nivel internacional en la Bienal de Venecia. Lozano-Hemmer fue el primer artista en representar a México en la Bienal de Venecia, con una exposición en el Palazzo van Axel en 2007.