El movimiento surrealista nació en París en 1924, y muchas mujeres formaron parte de él, pero rara vez fueron reconocidas como protagonistas. En palabras del artista e historiador Roland Penrose: “Claro que la mujer era importante, pero como musa”.

Muchas artistas han librado una dura batalla para afirmar su autonomía creativa. A lo largo del siglo XX, las mujeres surrealistas perseveraron, a menudo en una multitud de disciplinas, para dar a conocer su arte, pero muchas de ellas apenas comienzan a ser reconocidas, anota la casa de subastas Bonhams.

  • Grace Pailthorpe (1883-1971). Es una de las artistas más fascinantes del surrealismo. Nacida en Inglaterra, es la única mujer de diez hijos criados en una estricta secta religiosa. Al principio de su carrera, trabajó como cirujana en hospitales militares durante la Primera Guerra Mundial. Después de muchos viajes, regresó a Inglaterra y se dedicó a la psicología y al análisis freudiano, en particular a la delincuencia juvenil. [Foto inicial: Grace Pailthorpe. Sin título].
  • Dora Maar (1909-1997). Nacida en París como Henriette Theodora Markovitch, creció entre Argentina y Francia. Conocida por ser la compañera de Pablo Picassoy el tema de varias de sus pinturas, fue un ícono del surrealismo por derecho propio gracias a sus fotomontajes, pinturas y poemas que abordan temas sociales y políticos.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Dora Maar. <em><i>Composición al pie de la ventana</i></em>. Dora Maar. Composición al pie de la ventana.

 

  • Jane Graverol (1905-1984). Hija del pintor simbolista Alexandre Graverol, nació en Bélgica. Ingresó en la Real Academia de Bellas Artes de Bruselas en 1921 y comenzó a exponer en 1927. Antes de que despegue el movimiento, sus pinturas sugieren las características del surrealismo. Su obra La línea de luz (1959), donde el espacio negativo de un cañón forma un cuerpo femenino sin rostro contra el telón de fondo de una puesta de sol de color naranja sangre, crea tensiones entre el yo interior y exterior, lo espiritual y lo corpóreo, la conciencia y los sueños.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Jane Graverol. <em><i>La línea de luz.</i></em>  Jane Graverol. La línea de luz. 

 

  • Marie-Berthe Aurenche (1906-1960). Hermana del guionista Jean Aurenche, en 1927 conoció a Max Ernst, líder del surrealismo, con quien se casó. Habiendo entrado en los círculos de este movimiento junto a Man Ray, Lee Miller o incluso André Breton, su trabajo permaneció largo tiempo olvidado en el canon de la historia surrealista. Ambos artistas se divorciaron en 1936, tras lo cual Marie-Berthe se convirtió en amante del pintor francés Chaïm Soutine.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Marie Berthe-Aurenche y Max Ernst. <em><i>Retrato de André Breton</i></em>. Marie Berthe-Aurenche y Max Ernst. Retrato de André Breton.

 

  • Valentine Hugo (1887-1968). La artista y escritora francesa es mejor conocida por su trabajo con el ballet ruso y los surrealistas franceses. Después de estudiar en la Ecole des Beaux-Arts de París en 1908, creó vestuarios y decorados para ópera y teatro.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Valentine Hugo. <em><i>El espíritu del vino o el alcoholismo</i></em>. Valentine Hugo. El espíritu del vino o el alcoholismo.

 

  • Rachel Baes (1912-1985). Nació en Bruselas, y a pesar de una relación difícil con su padre, el paisajista y retratista Émile Baes, sus progenitores defendieron sus aspiraciones creativas desde edad temprana. Sin haber estudiado arte formalmente, debutó en la escena artística desde muy joven probando suerte con naturalezas muertas.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Rachel Baes. <em><i>Edipo y la Esfinge</i></em>. Rachel Baes. Edipo y la Esfinge.

 

  • Léonor Fini (1907-1996). Nacida en Buenos Aires, de padres italianos y argentinos, creció en Trieste, Italia. Su educación artística fue en gran parte autodidacta, perfeccionando en su adolescencia el conocimiento de la anatomía humana en la morgue local.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Léonor Fini. <em><i>Retrato femenino núm. 44</i></em>. Léonor Fini. Retrato femenino núm. 44.

 

  • Eileen Agar (1899-1991). La artista británico-argentina sigue siendo una de las figuras impulsoras del surrealismo. Durante su infancia en Buenos Aires y luego en la escuela en Inglaterra, la creatividad la fascinó y se sumergió en la obra de Edmund Dulac, Arthur Rackham y Paul Nash, con quienes luego entablaría una relación creativa intensa y romántica. Después de estudiar arte en Londres, se mudó a París en 1928, donde conoció a Breton y Paul Éluard. Pintó su primera obra surrealista en 1930, basada en el manifiesto surrealista de Breton.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Eileen Agar. <em><i>Sin título</i></em>. Eileen Agar. Sin título.

 

  • Dorothea Tanning (1910-2012). A lo largo de una carrera que abarca 70 años, la artista y escritora estadounidense combinó hábilmente lo surrealista y lo real. Descubrió el surrealismo en Nueva York en la década de 1930, en particular con la exposición Fantastic Art, Dada and Surrealism en el MoMA, que causó una fuerte impresión en el joven artista.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Dorothea Tanning. <em>Les 7 Perils Spectraux</em>. Dorothea Tanning. Les 7 Perils Spectraux.

 

  • Leonora Carrington (1917-2011). La artista y novelista británica nació en una rica familia católica irlandesa. Animada a convertirse en una chica de la alta sociedad, se rebela contra estas represivas expectativas familiares para dedicarse a la creación artística. En la Escuela de Arte de Londres, se encuentra en contacto con el arte de vanguardia y el surrealismo.

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Leonora Carrington. <em>Operation Wednesday.</em> Leonora Carrington. Operation Wednesday.