La Costa Alegre de Jalisco dio la bienvenida una vez más en Semana Santa a uno de los torneos de polo más importantes del país, en las canchas más hermosas de este deporte en México. Y claro, además del juego se vivió una semana plena de sol, mar y fiesta increíble.

 

1er. Chukker

Si veinte años no es nada, ocho son apenas un suspiro. Sin embargo, en esa bocanada de aire caben muchas historias, y una de ellas, la de la Copa Agua Alta, acaba de escribir otro capítulo más con letras de sol, arena y mar. Cómo ha cambiado este torneo de polo desde su creación, pues de ser una competencia prácticamente de carácter familiar ahora se ha convertido en un referente del polo mexicano e internacional. Hoy, este campeonato del deporte de la realeza tiene un cúmulo de importantes patrocinadores, es seguido por infinidad de medios impresos y electrónicos y recibe a un número significativo de espectadores que gozan no sólo con la hermosa estética de un deporte lleno de matices y riesgos, sino de un encuentro social donde cada noche es un motivo de celebración.

 

 

Así pues, del pasado 31 de marzo al 7 de abril, seis equipos (Agua Alta Scappino, Careyes Pirelli, Audi Bentley, Jumex Sport, BAM Iusacell y Alemania Sif Be!) se disputaron la supremacía de un evento polístico único y original en las costas del hipnotizante Careyes. Jugadores de nueve países (México, Italia, Portugal, Perú, Colombia, Alemania, Estados Unidos e Inglaterra) dieron realce con su calidad en el Shangrila de la familia Brignone.

 

2do. Chukker

La reserva natural de la playa Teopa de Careyes fue testigo de una semana de intensa lucha entre los equipos participantes que, en un sistema round robin y bajo un formato Pro-AM de 7/8 goles, sudaron el orgullo y la ambición para erigirse como el mejor. Cada equipo contó con una combinación de jugadores amateurs de primer nivel y polistas profesionales, lo cual, sin duda, elevó mucho la categoría de este torneo, del año pasado a este último. Todas las batallas quedaron grabadas en la memoria de los privilegiados espectadores, quienes tuvieron la fortuna de ver jugar a jinetes de la talla del peruano Guillermo Li (5 de handicap), el mexicano Alejandro Gómez de Parada (3), el argentino Jaime Zavaleta (5), el colombiano Federico Uribe (5) y el nacional Valerio Aguilar (6), crack perteneciente a una generación heroica y de calidad que logró en 1987 el subcampeonato mundial en Argentina.

 

3er. Chukker

Y al final llegaron los mejores y por méritos propios. El partido por el 3er. y 4to. puestos fue disputado por los equipos Careyes Pirelli (Jimmy Geiebler, A. Gómez de Parada, Raúl Ramírez y Giorgio Brignone) y el jovencísimo y talentoso Jumex Sport (Manuel Matos Gil, Federico Uribe, Alberico Ardissone y Diego González). Fue una lucha tan pareja que tuvo que definirse hasta y último chukker. El marcador final fue: Careyes 7 - Jumex 6. Es importante señalar que son dos los jugadores que realmente fueron los absolutos protagonistas del encuentro, Gómez de Parada y Uribe, quienes anotaron 7 y 6 goles respectivamente. El partido fue un delicioso aperitivo previo al banquete de la Gran final.

 

 

4to. Chukker

La “Gran Final” fue un auténtico bocatti di cardinale, protagonizada por el asombroso equipo Agua Alta Scappino (Alberto Ardissone, Federico Uribe –que sustituyó de ultimo momento al Guillermo el chino Li, pues tuvo que abandonar el país por el fallecimiento de su padre–, Esteban Uribe y Kiko Cassanova) y el considerado favorito Alemania Sif Be! (Bolko Kissling, Valerio Aguilar, Diego Velarde y Uwe Zimmerman). Fue un partido trepidante, emotivo al máximo, donde las volteretas en el marcador estuvieron a la orden del día.

Pero sólo un equipo ganaría, y ése fue el Agua Alta Scappino, gracias en mucho al indiscutible talento de Federico Urbe que metió 7 goles –dos de ellos de bella manufactura, y que dieron vuelta al marcador en los últimos dos minutos del chukker final– y otros 2 tantos de su hermano menor Esteban para dejar el marcador 9 a 8. Por parte de los subcampeones destacó como siempre el eterno Vale Aguilar y Diego Velarde, con 3 goles cada uno.

Cabe señalar que el campeón goleador profesional fue el Vale Aguilar con 29 tantos y el amateur Manuel Matos Gil con 14.

 

 

5to. Chukker

Más allá de lo estrictamente deportivo, la 8a. Copa Agua Alta Scappino fue el marco perfecto para un encuentro social realmente festivo, con gente que vino de todas partes del mundo y quienes tuvieron la oportunidad de reunirse noche a noche en las diferentes fiestas llenas de glamour y diversión sin límite. Destacan los eventos del programa oficial, como la Cena en el Restaurante Rancho de Don Andrés de Massimo, la Charreada-Escaramusa-Concurso de Caballos Bailadores en el pueblo de Zapata y la Fiesta de Clausura realizada en la disco Cocodrilo Azul de Playa Careyitos.

Aunque, a decir de AMURA, uno de los patrocinadores oficiales del torneo, la mejor fiesta fue la llevada a cabo en Casa Mi Ojo (de Gian Franco Brignone, ese gran visionario y ser humano creador de Careyes hace casi 30 años).

 

6to. Chukker

La 8a. Copa Agua Alta Scappino fue un éxito total, rotundo en todos los sentidos. Un agradecimiento y felicitación especial a Alberto Ardissone, fundador del campeonato más bello en el lugar más hermoso para jugar al polo en México, y a Giorgio Brignone, Presidente del Club de Polo Costa Careyes, pues con su gran visión y magna organización  han logrado que el polo mexicano siga creciendo día con día. Es importante señalar el carácter altruista del evento, pues todas las ganancias fueron donadas a la Fundación Vargas en beneficio de los niños discapacitados. Y mientras llega la edición 2008 de este campeonato con aroma a salinidad marina, en ese paraje de ensueño y magia que es Careyes, sigamos soñando con polo, si no es el Rey de lo Deportes, definitivamente sí es el Deporte de Reyes.    

 

 

Texto: Juan Manuel Orbea ± Foto: Hugo Salazar.