En la última década, el concepto de bienestar ha dejado de ser un complemento en la experiencia de viaje para convertirse en su razón de ser.
En este cambio de paradigma, Four Seasons se ha consolidado como un referente global, ofreciendo a sus huéspedes algo más que lujo y confort: un auténtico viaje de renovación física, mental y espiritual.
A través de programas diseñados por expertos y arraigados en tradiciones locales, la cadena invita a sumergirse en experiencias que equilibran mente, cuerpo, nutrición y sueño. Desde rituales milenarios hasta innovaciones de vanguardia, cada propuesta está cuidadosamente pensada para dejar una huella duradera en el viajero. Cada destino Four Seasons ofrece una experiencia.
El sueño, base de todo bienestar
▪ The Nam Hai, Hoi An, un programa de yoga nidra, diagnóstico mineral y mapeo corporal busca mejorar la calidad del sueño a largo plazo.
▪ Sensei Lanai, la alianza con tecnología WHOOP y expertos en conducta optimiza los ritmos circadianos.
▪ Hong Kong, un baño sonoro flotante bajo la luna llena combina relajación acuática, sonidos envolventes y delicias de temporada para inducir una paz total.
Tradiciones locales con un toque global
▪ Península Papagayo, Costa Rica, una ceremonia de cacao conecta con la esencia de la tierra y el poder de las plantas curativas.
▪ Cabo San Lucas, un masaje inspirado en la tribu Kumiai fusiona obsidiana caliente y rebozo tradicional.
▪ Londres, la escapada a Taliouine ofrece un ritual corporal marroquí que nutre, purifica y revitaliza.
Movimiento como meditación
▪ Seychelles at Desroches Island, surfear con Tropicsurf se convierte en meditación en movimiento, entre olas y arrecifes.
▪ Kyoto, el ritual de bambú activa la circulación y libera tensiones con técnicas japonesas centenarias.
Bangkok, el Muay Thai y el boxeo combinan fuerza, disciplina y cultura en un entrenamiento que fortalece cuerpo y mente.
Nutrición que trasciende en la mesa
▪ Singapore, la Chi Longevity Clinic ofrece diagnósticos médicos avanzados y planes personalizados para retrasar el envejecimiento, complementados con menús que prolongan la vitalidad.
▪ Petite Anse, Seychelles [foto inicial], un viaje culinario criollo une senderismo, exploración botánica y cocina local.
▪ Sensei Lanai, las estrategias nutricionales se personalizan con datos sobre capacidad aeróbica y composición corporal, integrando ciencia y sabor.