Un moderno súper-yate

Sir Thomas Octave Murdoch Sopwith comisionó la construcción del Endeavour para enfrentar el desafío que representaba la America’s Cup en 1934. Sopwith estaba ansioso por asegurarse de que dicho yate tuviera las características más avanzadas que fueran posibles; con ello y su experiencia en diseño de aviones, aplicó la tecnología aeronáutica a los cabrestantes y aparejos, para convertir al Endeavour en la nave más fina de su época.

Al entrar en la flota de carreras británica, la embarcación barrió de manera espectacular, alojándose en los corazones de dueños y operadores de yates, al ganar varias carreras en su primera temporada. El Endeavour fue pionero en el desarrollo de la génova cuadrangular, una vela mayor con dos pajarines, que ofrece una inmensa área de lienzo y potencia, que todavía se usa en carreras Clase J.

Tiempo después, tras haberse ido a Estados Unidos, regresó a Inglaterra para dominar la escena británica de carreras hasta 1938, cuando quedó en un astillero antes de la guerra.

 

 

El destino del Endeavour pendió de un hilo por más de 46 años. Entre otras ignominias fue vendido a un mercader de chatarra en 1947, sólo para que otro comprador lo salvara unas horas antes de que comenzara su demolición. En la década de 1960 se hundió en el Río Medina, en Cowes, Reino Unido. De nuevo, de último momento, dos carpinteros lo compraron por 10 libras esterlinas y parcharon sus agujeros con bolsas de plástico, consiguiendo que flotara una vez más. A principios de los años 80, permaneció anclado en Calshot Spit, una base de hidroplanos que mira hacia el Estrecho de Solent; su estado era una completa ruina: un casco destrozado, herrumbroso, desolado, sin quilla, ni timón, ni lastre, ni interiores.

 

 

 

 

 

 

Rescate y preservación

Con el tiempo, fue rescatado y en 2010 inició una extensa renovación que duró 18 meses en el Yachting Developments, en Nueva Zelanda; ahí se detectó que únicamente estaban intactas la transmisión y la hélice; se cambió de lugar el sistema de cuadernas metálicas de las cubiertas con el fin de ajustar los nuevos vectores de distribución de cargas, así como de la nueva configuración de la cubierta. Durante toda la renovación se tuvo absoluto cuidado en preservar la embarcación original; asimismo se aprovechó la ventaja de los sistemas de velamen del siglo XX, con un realce en el desempeño y una mejorada funcionalidad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Durante la renovación entera, se mantuvo la filosofía de longevidad y calidad de servicio para asegurarse de que el Endeavour continúe como el ícono histórico que actualmente representa y permanezca para las futuras generaciones.

La remodelación incluyó la remoción y reemplazo de la cubierta de intemperie, lo que abarcó el equipamiento de las cubiertas. Se cambió de lugar la estructura de cuadernas metálicas de las cubiertas para ajustar los nuevos vectores de distribución de cargas.

Después de su renovación, se fue directamente a St. Barths, para competir en la regata Bucket de 2012, finalizando como campeón. Su propietario lo ha usado sólo de manera privada y ha mantenido inmaculadamente este navío de 19,950,000 euros.

Aunque todavía lleva las líneas de su diseño original, es en cada pulgada, un moderno superyate con mástil y botavara de aluminio, cabrestantes hidráulicos, hélices de proa, desalinizador de agua marina y equipo de navegación y entretenimiento.

Debajo de sus cubiertas, este lujoso yate tiene paneles de color cerezo americano, placas fijas de níquel y aluminio, mobiliario hecho en una mezcla de telas de lana, algodón y seda.

Los cuatro camarotes del Endeavor se dividen en una habitación tamaño King, dos Queen y un camarote gemelo; todas tienen un baño independiente, con toalleros-calefactores; en tanto que la suite maestra adicionalmente aloja una confortable bañera de gran tamaño.

Entre sus amenidades, está equipado con un sistema de entretenimiento, una colección de películas, así como juguetes acuáticos con el fin de proveer entretenimiento sin fin en cualquier viaje: a bordo uno puede hallar una lancha neumática, tablas con velas para windsurfing y un surtido de equipo para buceo y esnórquel. Este yate de lujo resulta excelente para realizar un cómodo viaje en crucero a nueve nudos; en tanto que su capacidad de ocho tripulantes asegura que se satisfagan las necesidades de cada invitado.

 

Especificaciones

Año

2012

Eslora 

6.72 m 

Manga 

8.30 m

Motor

Caterpillar Inc 352 HP 262 KW

Velocidad máxima 

13 nudos 

Tanque de combustible

9,092 L 

Tanque de agua 

4,546 L 

 

Texto: Edmiston ± Foto: © Edmiston