Fiel a su espíritu automovilístico e impecable herencia relojera, Chopard presenta una pieza que trasciende el tiempo y las pistas: Mille Miglia Classic Chronograph Tribute to Sir Stirling Moss.

Se trata de una edición limitada a tan solo 70 ejemplares que conmemora una de las gestas más memorables del automovilismo: la victoria de Stirling Moss y Denis Jenkinson en la Mille Miglia de 1955 a bordo del Mercedes-Benz 300 SLR dotado de un motor de ocho cilindros y 300 CV de inyección de combustible.

La dupla completó las 1,000 millas de la mítica carrera italiana en un tiempo récord de 10 horas, 7 minutos y 48 segundos, alcanzando una media de velocidad de 157.65 km/h, marca que, siete décadas después, sigue sin ser igualada. Ese espíritu audaz y visionario se traslada ahora a la muñeca con este cronógrafo que captura la esencia de la hazaña y la elegancia del piloto británico.

El reloj se presenta en una caja de Lucent Steel de 40.5 mm y 12.88 mm de grosor, un exclusivo acero de Chopard con un 80% de contenido reciclado, caracterizado por su brillo, durabilidad y sostenibilidad. Las asas soldadas evocan los autos de carreras clásicos, mientras que el cristal de zafiro abombado tipo "glass box" permite admirar una esfera plateada opalina, reminiscente del acabado del icónico coche de Moss.

 

 

Amura,AmuraWorld,AmuraYachts, Stirling Moss y Denis Jenkinson después de recibir la bandera a cuadros como vencedores de la Mille Miglia de 1955 a bordo del Mercedes-Benz 300 SLR. Stirling Moss y Denis Jenkinson después de recibir la bandera a cuadros como vencedores de la Mille Miglia de 1955 a bordo del Mercedes-Benz 300 SLR.

 

El diseño retoma el ADN vintage de la línea Classic Chronograph, rediseñada por Chopard en 2023, y lo complementa con una correa perforada en tono marrón de cuero de becerro, al estilo de los guantes de conducción de antaño. Las agujas de bastón e índices recubiertos de Super-LumiNova Grado X1 garantizan una legibilidad excepcional, incluso en condiciones extremas.

En su interior late un movimiento cronógrafo mecánico automático certificado por el COSC, con reserva de marcha de 54 horas y una escala taquimétrica que subraya su vocación deportiva. El fondo transparente de la caja no solo permite admirar la mecánica, sino que también revela un grabado conmemorativo: la fecha de la carrera, el tiempo récord y una bandera de cuadros entrelazada con la Union Jack, emblema del linaje británico del homenajeado.

Como veteranos competidores de la Mille Miglia, me pareció natural rendir homenaje a una carrera tan legendaria con un reloj igual de excepcional”, comenta Karl-Friedrich Scheufele, copresidente de Chopard y apasionado del automovilismo clásico.