El nuevo y exclusivo acabado de pintura "Ombré by Mulliner" de Bentley, que combina dos colores distintos a lo largo del vehículo, se ha aplicado por primera vez al sedán de cuatro puertas Flying Spur.
Este extraordinario nuevo acabado combina dos tonos complementarios que se extienden por los laterales y el techo del vehículo, y está pintado íntegramente a mano por los hábiles artesanos del taller de pintura de Bentley's Dream Factory en Crewe, Inglaterra.
La pintura del nuevo Flying Spur pasa del vibrante Azul Topacio en la parte delantera al más oscuro Azul Windsor en la parte trasera, con un desvanecimiento que se extiende por la sección central del vehículo, a través de las puertas, los umbrales y el techo.
El proceso, que requiere casi 60 horas de trabajo por parte de dos técnicos de pintura altamente cualificados, comienza con la aplicación de los colores individuales en la parte delantera y trasera de la carrocería.
La transición se produce en el centro del auto y se aplica por etapas, utilizando pintura teñida mediante métodos de mezcla tradicionales para lograr el efecto Ombré. Se ha tomado la decisión de que la transición sea simétrica en todo el vehículo.
La técnica Ombré está disponible en dos combinaciones: Oro Sunburst a Naranja Llama y Tungsteno a Ónix. Debido a la complejidad de la combinación de ambas pinturas, la selección de tonos disponibles se ha seleccionado específicamente para garantizar una transición uniforme y gradual entre ambas y evitar la aparición de un tercer color durante la transición (por ejemplo, de amarillo a azul se obtendría verde).
Cada tono de pintura se comporta de forma diferente al aplicarse, por lo que la habilidad reside en cómo los técnicos de pintura responden a la reacción durante la pulverización. Esto significa que cada coche será único, pero lucirá perfecto a simple vista gracias a la habilidad de los técnicos.