Louis Vuitton, Lucara Diamond Corporation y HB Company de Amberes, colaboran en conjunto para transformar un diamante de 1758 quilates en auténticas joyas de colección. “Del centro de la Tierra hasta el corazón de la alta joyería”.

Sewelô es un hallazgo raro y único en Karowe “piedra preciosa”, la mina de diamantes, propiedad de Lucara que está en la franja del desierto Kalahari. Ahí utilizan la tecnología más avanzada del mundo; ofrecen responsabilidad y sustentabilidad corporativa y social, así como seguridad y bienestar para sus trabajadores. Lucara tiene el compromiso de asegurar que Sewelô tenga un impacto positivo y duradero sobre Botsuana.  

Dos mil millones de años se esconden en su interior, la extensión completa de variaciones de color y claridad aún están ocultas. Este era el tipo de rareza extrema que Louis Vuitton siempre buscaba. Actualmente la firma trabaja y estudia a Sewelô de forma cercana con los maestros cortadores de diamantes en la HB Company de Amberes.  

El corte de diamantes es una mezcla antigua, casi mística del arte y la ciencia; la experiencia y la intuición. La tecnología de vanguardia jugará un papel crucial durante el proceso, desde el escaneo inicial hasta la planeación del cortado y el pulido.

El tamaño del diamante permitirá la producción de cortes personalizados; este movimiento de exclusividad continuará con la herencia de Louis Vuitton de pedidos especiales hechos a la medida.

De esta manera, el cliente estará íntimamente involucrado durante todo el proceso creativo de un diamante magnífico y extraordinario. Desde su origen en la mina, hasta convertirse en una obra maestra, concebida y creada en la Place Vendôme de París.